Política de sobrestimación del gasto genera controversia en el INE durante la gestión de Lorenzo Córdova

CMDX a 5 de abril de 2024.-Durante los nueve años de la presidencia de Lorenzo Córdova en el Instituto Nacional Electoral (INE), se ha desatado una polémica debido a una política de sobrestimación del gasto, con el objetivo de generar remanentes. Según informes presentados por Luis Oswaldo Peralta Rivera, encargado del Órgano Interno de Control (OIC) del organismo electoral, entre 2014 y 2023, estos remanentes ascendieron a 10 mil 515 millones de pesos. Sin embargo, solo una fracción, 4 mil 79 millones, fue reintegrada a la Tesorería, lo que ha generado inquietudes sobre la gestión financiera del INE.

En una reunión con la junta directiva de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación, Peralta Rivera explicó que se ha detectado una resistencia significativa a devolver el gasto no ejercido. Además, reveló que se está investigando un desembolso de 11.6 millones destinados a una supuesta memoria de gestión de Córdova, que en realidad se tradujo en el pago de tres contratos de asesoría para funcionarios del INE.

Uno de los aspectos más preocupantes resaltados por Peralta Rivera es el patrón de gasto observado en los últimos años. Se documentó que entre enero y octubre de cada año, el gasto se mantenía contenido en el INE, pero aumentaba considerablemente entre diciembre y enero, aparentemente para evitar devolver fondos a la Tesorería. Este fenómeno se ejemplifica en el año 2020, donde el gasto pasó de 33 millones en enero a mil 348 millones en diciembre, con un remanente de mil 344 millones, de los cuales solo se reintegraron 698 millones.

El informe presentado también reveló que la mayoría de estos remanentes se destinó a dos fideicomisos del instituto: el de pasivo laboral y el de infraestructura, atención ciudadana y mejoramiento de módulos. Esto ha suscitado preocupaciones sobre la transparencia y la rendición de cuentas en el manejo de los recursos públicos por parte del INE.

Ante las preguntas sobre posibles sanciones a funcionarios, Peralta Rivera afirmó que si se encuentran responsabilidades administrativas, los funcionarios involucrados serán destituidos, mientras que los ex funcionarios enfrentarán inhabilitaciones.

A pesar de estas controversias, Peralta Rivera aseguró que los problemas administrativos detectados no ponen en riesgo el proceso electoral en curso y que el INE se encuentra administrativamente estable para hacer frente a los desafíos presentes. Sin embargo, estas revelaciones plantean interrogantes sobre la gestión financiera y la integridad institucional del organismo encargado de garantizar la equidad y la transparencia en las elecciones en México.